Tratamiento facial para pieles sensibles en Bilbao
¿Cómo es una piel sensible?
Las personas que tienen piel sensible sienten ciertos síntomas en el rostro que pueden ir acompañados de eritema o enrojecimiento. Los más usuales son la sensación de cosquilleo, tirantez, picor, calor o incluso ardor.
Una piel sensible siempre se suele pensar que son pieles finas y no es cierto. Una piel grasa y gruesa puede ser sensible igualmente
Estas sensaciones de incomodidad también pueden ir acompañadas de enrojecimientos. Son síntomas derivados de la exposición a estímulos internos o externos que no deberían causar irritación